enero 18, 2019
Todos los problemas tienen soluciones.
Eso es lo que los hace ser problemas.
Eso lo sabe bien Cristian Aravena (@whatcristian), que tuvo que hacer sacrificios entrenando, mejorando lo que comia y haciendo ajustes en su vida, para tener una foto como la de arriba. Puede que optes por no resolver el problema. Pero hay una solución. A lo mejor no la has encontrado aún. Tal vez tienes que seguir investigando o hacer un gran sacrificio.
Si no hay solución, entonces no hay problema.
«Quiero poder sacarme la polera en la playa, pero me siento incómodo con mi cuerpo.» Eso es un problema. Puedes resolverlo con la alimentación y entrenando.
«Quiero sacarme la polera en la playa, pero no quiero hacer ejercicio ni comer bien.» Eso no es un problema. Es un conflicto inevitable. Si quieres violar las leyes de la naturaleza para salir de ésa situación, entonces no es un problema. No lleva a ningún lado pretender que se resuelve el problema.
Entendiendo eso, podemos enfocarnos en los problemas reales que tenemos en frente.
-Pável Sáenz