Has escuchado antes lo importante que es la mente para lo que hacemos. Desde el dolor físico, el fracaso, las emociones, planear, la creatividad, acciones físicas, tu trabajo, todas se interpretan desde la mente. Si la mente no está ubicada donde tiene que estar, todo el resto se puede desmoronar.

Sin embargo, mucha gente pasa por alto el aspecto mental, como si fuera a funcionar automáticamente cuando debe, lamentablemente no es así, porque tiene muchos componentes que pueden desbalancearla.

Un poco de dificultad diaria puede ser un gran golpe, un trabajo que no te esperabas tener que ejecutar, el agua fría, o que el despertador suene antes de lo que tenías que sonar, son todas situaciones que pueden hacer perder la brújula de lo que tienes que hacer. Para qué decir un entrenamiento dónde tu debilidad aparece de principio a fin.

La herramienta mental puede recorrer un gran camino, la visualización, la meditación o ejercicios de respiración pueden tornar todo más claro y preciso. Agradezco día a día lo que estos ejercicios me han entregado en mi historial atlético, profesional incluso familiar. Ocupa tu mente, es poderosa.

Prueba éste ejercicio de respiración abdominal.

Nuestras clases de FlexWod lo incorporan y apuntan un poco a ello también. No solo a ser más flexible, sino que a controlar tu respiración, aunque estés en posiciones incómodas, a mantener tu compostura en momentos difícil.

Personalmente, el FlexWod ha tenido un enorme impacto en rendimiento general. Son solo 20 minutos y el avance es notorio.

¿Tiene eso utilidad en tu vida?