Llegas antes de tu clase personalizada o grupal y no sabes qué hacer.

Entonces te quedas mirando y esperas o empiezas a revisar tu celular, llenas tu botella de agua, tal vez agarras un rodilllo y te haces masaje hasta que tu coach te aparece.

Hay algunas cosas que puedes hacer para prepararte mejor para lo que viene, todos queremos poder movernos mejor, más fuerte y más rápido, aquí van algunas ideas:

1. Abre y cierra las articulaciones: la manera más fácil de hacer esto es con un calentamiento dinámico, con algunos estiramientos dinámicos y de a poco pasar a movimientos más agresivos para activar los músculos. Algunos de mis favoritos son abrir y cerrar cadera, rotaciones articulares, patadas en distintas direcciones (si no recuerdas algunos de estos, acércate a tu coach para que te los explique).
2. Sube el ritmo de tu corazón: No me refiero a que sea muy fuerte. Esto debe ser a un ritmo medio, incluso lento, que puedas conversar para que la sangre circule y el corazón bombee un poco. Por ejemplo: Una vuelta de la manzana trotando, remar , hacer bicicleta o ejercicios como tipo skipping.
3. Enfócate en tus necesidades: Todos tenemos distintas fortalezas y debilidades, dedícale más tiempo a alguna debilidad. Por ejemplo, si vas a hacer un movimiento sobre la cabeza en el entrenamiento y sabes que tiene poco rango y flexibilidad, o una posición inestable, trabaja en eso unos minutos, abriendo la escapula con el PVC, ocupando algún elástico o algún tipo de extensión de espalda. De nuevo, habla con tu coach para que te guíe en qué movimientos son mejores para ti.
4. Calentamiento deportivo-específico: ESTO lo haces con tu coach, ya sea en tu clase personalizada o en la grupal ¡de eso nos encargamos nosotros!

Recuerda, ahora en estos meses que empieza a hacer más calor es más corto el calentamiento probablemente.

En resumen, los expertos concuerdan que al calentar mejor te mueves con más eficiencia, lo que significa que hay menos riesgo de lesión ¡y tu rendimiento se disparará también!